Brendan Depa, el adolescente de Florida que agredió violentamente a una profesora de secundaria tras que le fuera retirado un Nintendo Switch, fue sentenciado a cinco años de prisión, según reportó Fox News. El incidente ocurrió en febrero del año pasado en Matanzas High School, en Palm Coast.

El juez de circuito Terence Perkins dictó la sentencia el martes por la tarde. Depa, quien ahora tiene 18 años, fue captado por las cámaras de seguridad de la escuela mientras atacaba a Joan Naydich. En las imágenes se observa a Depa, de 2 metros de altura y 122 kilogramos, corriendo hacia la profesora, quien tuvo poco tiempo para defenderse antes de ser derribada.

Luego, la golpeó repetidamente, dándole quince puñetazos mientras ella estaba inconsciente. “Recibí 15 puñetazos en pocos segundos, no lo olvidaré jamás”, comentó la profesora en declaraciones a FOX 35.

Además de la condena de prisión, Depa recibió una pena adicional de quince años de libertad condicional y será colocado en un hogar grupal tras su liberación, según los registros judiciales. El New York Post reportó que el joven fue acusado de agresión agravada con lesiones corporales y que no era la primera vez que mostraba comportamientos violentos.

El caso ha causado una gran conmoción y generado un debate sobre la seguridad en las escuelas y la manera de manejar situaciones de violencia por parte de estudiantes. La comunidad educativa y los padres han expresado su inquietud y piden la implementación de medidas más estrictas para evitar futuros incidentes similares. La profesora Joan Naydich ha recibido un fuerte respaldo de la comunidad y ha instado a la adopción de políticas más efectivas para proteger a los docentes y al personal escolar.

Depa, quien tiene antecedentes de comportamiento violento, enfrentará un período de rehabilitación y supervisión tras cumplir su condena en prisión. La sentencia incluye un plan de reintegración que busca abordar los problemas subyacentes que llevaron a su conducta agresiva, con la esperanza de prevenir futuras reincidencias. Las autoridades judiciales y educativas están colaborando para asegurar que se implementen programas de intervención temprana y apoyo psicológico tanto para los estudiantes como para el personal escolar.

El caso de Brendan Depa subraya la necesidad de revisar y reforzar los protocolos de seguridad y respuesta ante emergencias en las escuelas. La tragedia ha dejado una huella profunda en la comunidad de Palm Coast y destaca la importancia de crear entornos escolares seguros y de apoyo para todos.

Por Fdigital

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