El secretario de estado de EE.UU., Antony Blinken, se reunirá este viernes en Washington con el ministro del Departamento de Enlace Internacional del Partido Comunista Chino (PCCh), Liu Jianchao, unas horas antes de que Taiwán celebre su elecciones presidenciales.
Sin dar detalles sobre los objetivos o el contenido de la reunión, la agenda del secretario para este viernes detalla que la reunión tendrá lugar a las 10:00 hora local (15:00 GMT) en el Departamento de Estado de la capital estadounidense.
El encuentro tiene lugar un día antes de las elecciones presidenciales y parlamentarias en Taiwán, en las que los ciudadanos de la isla decidirán al sucesor de la presidenta Tsai Ing-wen.
La cuestión taiwanesa sigue siendo uno de los principales puntos de fricción entre China y EE.UU., que, al margen de ser el principal suministrador de armas de Taiwán, se podría ver ante la tesitura de tener que defender a la isla en caso de conflicto.
El pasado diciembre, ambos países retomaron el diálogo militar de alto nivel, suspendido por China después de que la entonces presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, visitó Taiwán en agosto de 2022, un viaje que enfureció a las autoridades chinas.
Los presidentes chino y estadounidense, Xi Jinping y Joe Biden, respectivamente, acordaron la reanudación de los diálogos castrenses durante la reunión que mantuvieron el pasado noviembre en los márgenes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, en inglés) en San Francisco (EE.UU.).
Más de 19 millones de taiwaneses están habilitados para votar en las elecciones del sábado, en las que el candidato oficialista del Partido Democrático Progresista (PDP), William Lai (Lai Ching-te) competirá con los aspirantes del Kuomintang (KMT), Hou Yu-ih, y del Partido Popular de Taiwán (TPP), Ko Wen-je.
El mandato actual del PDP ha estado marcado por el recrudecimiento de las tensiones con China y Pekín ve a Lai como un «separatista» del PDP, partido con el que China cortó la comunicación en 2016 después de que la formación ganara los comicios de aquel año.
Aunque ninguno de los aspirantes habla de romper el statu quo actual, en el que Taiwán no ha declarado formalmente la independencia pero tampoco está bajo control de China, una nueva victoria del PDP -la tercera consecutiva- constituiría el peor de los escenarios para Pekín, que confía en culminar la «reunificación» nacional antes de 2049, cuando se cumplirán cien años del nacimiento de la República Popular China.
Taiwán -donde se retiró el ejército nacionalista chino tras la derrota a manos de las tropas comunistas en la guerra civil- se ha gobernado de manera autónoma desde 1949, aunque China reclama la soberanía sobre la isla, a la que considera una provincia rebelde para cuya «reunificación» no ha descartado el uso de la fuerza.