El Pregonero, Santo Domingo. – En una entrevista donde se abordaron diversos temas , la inteligencia artificial recibió un tratamiento especial, por sus características novedosas e innovadoras, el director del Centro de Estudio de Urbanismo e Infraestructura de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Flunglode), César Fernández, dijo que hoy en el país se está hablando de “Inteligencia Artificial”, pero que desde hace más de doce años el presidente de Funglode, Leonel Fernández viene conversando sobre el particular.
Indicó, que en el proyecto RD-2044, todos los proyectos están definidos por áreas de desarrollo, y un ejemplo de eso es la “Eficientización de la Operación Gubernamental”, que consiste en concentrar en edificios inteligentes, tanto virtuales como presenciales los servicios que ofrece el Estado Dominicano.
“El proyecto de “Eficientización de la Operación Gubernamental”, contempla la agrupación de todos los servicios que ofrece el Estado, usted puede entrar a un lugar ya sea virtual o presencial y obtener una patente para un negocio, licencia de conducir, pasaporte, así como demás servicios para operar cualquier tipo de negocio o entidad en el territorio nacional, y todo eso está previsto en el proyecto RD-2044, desde el año 2016, refirió.
El profesional de la ingeniería prosiguió diciendo que, “son muchos los proyectos inteligentes, te menciono de manera puntual que tenemos carreteras diseñadas, que con el rodamiento de los vehículos generamos energía eléctrica, para iluminar las carretas y comunidades aledañas. Todos los edificios gubernamentales y no gubernamentales que hemos diseñado en RD-2044, como escuelas, liceos, y politécnicos, el 100%, están diseñados con energías alternativas, que su uso y desarrollo dependerá de la zona y sus condiciones climáticas”.
Análisis y estudio del tránsito en el Gran Santo Domingo y Santiago
Manifestó que durante tres años los técnicos de Funglode de manera voluntaria, estudiaron el tránsito en el gran Santo Domingo, y el Gran Santiago y los resultados fueron impresionantes.
“En el Gran Santo Domingo observamos 40 intersecciones y en Santiago 15, en esos lugares colocamos drones a volar durante todo un mes y levantamos las informaciones precisas de lo que pasaba en esos puntos, luego adquirimos de las telefónicas la información de las datas de los celulares, estos emiten informaciones que nos dicen a nosotros cuántas personas van en un vehículo según las señales que envía, no quienes van, porque esa es una información privada” indicó.
Continuó explicando que “a través de un software que adquirimos toda esa información, la del dron, y de los celulares, la cruzamos y diseñamos estas dos ciudades de manera virtual, e hicimos una proyección de que se puede hacer en ambas ciudades, ahí nos dimos cuentas que el problema del tránsito no se resuelve con más túneles, ni elevados; la solución es hacer más línea del metro, lo que justamente hizo Leonel Fernández en sus gobiernos, y gracias a eso hoy el Gran Santo Domingo no está sumergido en un caos más profundo,”.
Sobre línea dos del teleférico de los Alcarrizos
Al ser preguntado sobre la puesta en marcha del teleférico de los Alcarrizos, Fernández afirmó que ese medio no es un sistema de transporte masivo y que no es la solución a la problemática que vive el país en materia de transporte y movilidad.
“Fíjense ustedes que desde que hay un clima adverso hay que detener el sistema, si está lloviendo o tronando, cosa que no pasa con el metro, autobuses o con un tren ligero. Una solución si lo es el metro, iniciativa de Leonel Fernández, que todos los años transporta cientos diez millones de dominicanos, es decir 11 veces la población dominicana, en cambio el teleférico, la línea uno que está funcionando no llega al 5% de la población”, reseñó.
Planificación de la infraestructura en el país
Finalmente, especificó que lo primero que debe existir es un ejercicio de planificación en el país, porque nunca lo ha habido, segundo que los dineros del Estado sean bien invertidos porque cada vez se cuenta con menos recursos para inversión de capital, y tercero que los proyectos sean políticamente viables, es decir que no tenga objeción de la ciudadanía, porque fue previamente consensuado y socializado con la gente.