La suspensión de relaciones diplomáticas decretada por el gobierno de Nicolás Maduro no tendrá un gran impacto en República Dominicana, dado que el principal producto que se compraba a Venezuela, el petróleo, ha sido adquirido durante años en Estados Unidos, otros países y en el mercado “spot”.
Según Leonardo Aguilera, presidente de la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa), el mercado de compra de crudo y combustibles derivados ha sido diversificado desde hace muchos años. Aguilera señaló que el país adoptó una “previsión estratégica para no depender de un solo proveedor, de modo que las contingencias sean siempre manejables”.
El economista Luis Humberto Vargas también explicó que el país compra combustibles principalmente a Estados Unidos. Tras la recompra de la deuda de Petrocaribe, la deuda con Venezuela se ha mantenido en niveles muy reducidos, y desde finales de 2019 hasta la fecha se ha mantenido sin cambios en US$214.3 millones, de los cuales solo US$54.3 millones corresponden a Petrocaribe, explicó el economista Henri Hebrard.
“Dicho de otra manera, al mantenerse las importaciones de hidrocarburos desde Venezuela en cero, no ha habido más financiamiento por parte de Venezuela, lo que indica que República Dominicana ha logrado salir de una gran dependencia en el financiamiento de sus déficits, lo cual es muy positivo en las circunstancias actuales”, añadió el experto en hidrocarburos Hebrard.
Comercio
En términos de importaciones de hidrocarburos, las estadísticas de Aduanas confirman que el comercio bilateral fue prácticamente nulo en los últimos años. En 2019, las importaciones fueron de apenas US$3.05 millones de un total de US$3,719.23 millones; en 2020, US$0.06 millones de un total de US$2,110.33 millones; en 2021, US$0.02 millones de un total de US$4,025.76 millones; en 2022, apenas US$10.00 millones de un total de US$6,735.14 millones; y en 2023, apenas US$0.08 millones de un total de US$4,668.08 millones.
De acuerdo con Hebrard, datos de la DGA indican que el valor exportado por República Dominicana hacia Venezuela fue de solo US$23.87 millones en 2021; US$26.66 millones en 2022; y US$12.70 millones en 2023.
En términos interanuales, las exportaciones crecieron un 34.1% en 2024, después de haber crecido un 40.1% en 2023, un 8% en 2022, un 13.8% en 2021 y un 9.5% en 2020. En 2019 se registró una caída del 74%, según datos de ProDominicana.
De enero a junio de 2024, las exportaciones dominicanas hacia Venezuela alcanzaron US$6.5 millones, de los cuales US$5 millones correspondieron a ventas nacionales y US$1.5 millones a través del régimen de zonas francas. El valor exportado cayó un 3% interanual.
Los bienes vendidos a Venezuela incluyeron productos farmacéuticos, productos químicos inorgánicos, materias primas y manufacturas, reactores nucleares, calderas, extractos curtientes, calzado, polainas y botines, provenientes de cinco provincias del país y enviados por 46 exportadores.
Algunos sectores creen que el área más afectada será la aeronáutica y el turismo, aunque en menor medida.
Héctor Porcella, director del IDAC y próximo de la Junta de Aviación Civil (JAC), afirma que la suspensión de vuelos y relaciones con Venezuela afectará más a ese país que a República Dominicana. “Obviamente, las líneas aéreas dominicanas se verán afectadas y tendrá un impacto económico en sus operaciones”, explicó el director de la JAC.
Petrocaribe no existe
El acuerdo Petrocaribe, mediante el cual República Dominicana compraba petróleo y derivados a Venezuela, dejó de existir en 2017. Ese año, el Gobierno renegoció unos US$214 millones que adeudaba a ese país con un descuento, y un remanente también fue renegociado con bonos.
El acuerdo petrolero fue firmado por los presidentes Leonel Fernández y Hugo Chávez Frías en Montego Bay, Jamaica, el 6 de septiembre de 2005. Se consideró un convenio político de Chávez para ayudar a 17 países de América Latina y el Caribe no petroleros que enfrentaban altos costos para la compra de crudo venezolano y mundial. Posteriormente, el acuerdo se amplió a 18 naciones.
El acuerdo de Petrocaribe garantizaba una gracia de dos años y consistía en un préstamo basado en el valor del petróleo. Cuando el precio superaba los US$50, República Dominicana recibía el 30% como financiamiento.
También existió un plan de intercambio de deuda por alimentos con Venezuela, mediante el cual se exportaron hacia allá harinas, espaguetis, habichuelas negras y medicamentos.